Femme Fatale (Brian de Palma, 2002) es, como la gran mayoría de las películas de su director, amada y odiada a partes iguales. Lo cual me parece soberbio, ya que considero preferible la disparidad de gustos artísticos y la creación de debate sobre la uniformidad de criterios. Un homenaje al arquetipo de mujer fatal, la película cuenta las aventuras de una ladrona manipuladora y sensual y, como es habitual en el cine de Brian de Palma, los homenajes a Alfred Hitchcock y el manierismo formal son marca de la casa.
La escena presenta un striptease de Laura (Rebeca Romijn Stamos) y plantea la interesante característica de contar con dos mirones. Aunque no hay mucha ropa que quitar, la bailarina juega con el mobiliario (la maquina de discos, la mesa de billar), juega con el mirón número 1, sabe que el mirón número 2 (Antonio Banderas) la mira, juega con el sujetador... y dado que no hace grandes alardes de danza, creo que esta al alcance de cualquiera. El super-cuerpo es lo de menos.
El final de la escena, sin contarlo, es curioso y divertido. No tanto para Antonio Banderas.
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2 comentarios:
Y cuando se quita las medias?????
Nada, no se quita na de na... no es un striptease muy valiente que digamos pero es que ella va de durita y nosotras creo que no, jajajaj.
Besos anubis{M} y gracias por visitarme. Yo te visito siempre y me encanta tu blog.
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