sábado, 24 de marzo de 2012

Catálogo de perversiones en Pink Flamingos

Pink Flamingos (John Waters, 1972) es una de las películas más zafias y divertidas de la historia. La alegre pandilla de Baltimore, con Waters y Divine a la cabeza, montó un pollo monumental que aturde aún hoy a las mentes bienpensantes. Hay quien dice que es peli sólo apta para mentes enfermas.


El caso es que si eres una mente enferma como yo te ríes un montón con esta peli donde se expone un inmenso catálogo de perversiones. Hay que quitarse las gafas de pasta y disfrutar con un montaje espantoso y un guión churretosísimo pero divino. Culos que cantan, canibalismo, voyeurismo, castración, sexo sádico con pollos, fetichismo culinario, escatología, fetichismo de pies, incesto y la fecundación in vitro más cutre que se haya visto jamás. En la escena escogida, Channing, el guardian-esclavo de los Marple, se enfrenta a una de las esclavas embarazadas. Toneladas de incorrección, esta peli no es apta para los que se la cogen con papel de fumar.

miércoles, 21 de marzo de 2012

Fetichismo en Muere otro día

Muere otro día (Die another day, Lee Tamahori, 2002) es la peli que tiene una escena entre Pierce Brosnan y Halle Berry en la playa de La Caleta de Cádiz. Eso es un incentivo, aunque la trama no sea especialmente interesante. La falta de inspiración en el guión ya se notaba en esa misma escena playera: un homenaje a 007 contra el Doctor No.


Esta vez la villana es Miranda Frost (Rosamund Pike) una malvada fría y calculadora, como indica su nombre, pero no encontré ninguna escena con ella, digna de salir aquí. En cambio, con un breve papel, tenemos a la sin par Madonna, que nunca desfallecerá por encontrar sitio en el cine. Aquí es una instructora de esgrima que viste ropa especialmente fetish. Atentos al principio de la escena, cuando le ordena a Bond que le ajuste bien el corpiño. Ole mi niña.  


jueves, 15 de marzo de 2012

Tortura en El mundo nunca es suficiente

El mundo nunca es suficiente (Michael Apted, 1999) sigue con la táctica del reparto de campanillas para captar espectadores. Se mantiene el fichaje de Judi Dench como M y ahora se incluyen a dos actores reconocidos en el cine europeo: Robert Carlyle y Sophie Marceau, aquí Elektra King. Ambos como villanos de personalidad compleja y torturada.


Elektra King -el nombre lo dice todo- es la típica villana que al principio te crees que es buena. Aunque tambien dudas porque a) es algo rarita y b) es Sophie Marceau, que destila morbo insano. Cuando descubrimos que es la mala ya es tarde y tiene a Bond bien amarrado a una silla de tortura. Lo cual no es obstáculo para que la mala se contonee y le tire los tejos, lo cual demuestra lo víbora y perra que es. 


(El vídeo siguiente es el único que encontré con la escena)

sábado, 10 de marzo de 2012

Entrega en El mañana nunca muere

El mañana nunca muere (Roger Spottiswoode, 1997) opta por buscar un villano más sofisticado y acorde con las TIC; como ya digo, el nuevo ciclo de la mano de Pierce Brosnan buscaba recuperar el público que había perdido en las entregas anteriores y ahora recurre a nuevas estrategias. Villanos de qualité (aquí, un Jonathan Pryce curiosamente parecido a Steve Jobs) y chicas Bond que hacen guiños a nuevos mercados, aquí China (Michelle Yeoh).


En esta escena se repite el tópico jamesbondsiano de chica que se entrega a Bond y luego es sacrificada. No hay que ser muy lista para saber que si estas casada con el malo y te acuestas con tu antiguo novio, tienes todas las papeletas para salir mal parada. En las pelis de 007 estamos ya acostumbrados, pero Teri Hatcher parece que no las vió.


Un breve detalle fetish: esas medias+liguero que siempre llevan las damas en las pelis cuando salen de fiesta. Son un clásico.

miércoles, 7 de marzo de 2012

Ama sádica en GoldenEye

GoldenEye (Martin Campbell, 1995) es el primer Bond de Pierce Brosnan, que compone un agente 007 más elegante y cool pero, para mi gusto, menos atractivo que el de Timothy Dalton. Le falta el toque canalla y algo sucio del anterior y que felizmente ha resurgido con Daniel Craig. No obstante, la saga mantiene la seriedad y la espectacularidad de las dos películas de Mr. Dalton y se disfrutan un montón.


En GoldenEye tenemos a una de las mejores villanas de la serie: Xenia Onatopp, obra y gracia de Famke Janssen. Como buena femme fatale, utiliza sus encantos para tirarse a todo el que le conviene, domina en la cama y fuera de ella y tiene un arma secreta letal: sus piernas. Veanla en las siguientes escenas, la primera en plena acción con el pringado de turno (el almirante del barco al que hay que sabotear) y en la segunda, poniéndoselo difícil a Mr. Brosnan.