viernes, 30 de diciembre de 2011

Azotes en Estrellas dichosas

Estrellas dichosas (Lucky star, 1929) es un drama dirigido por Frank Borzage, uno de esos directores del mítico Hollywood de los años 20 y que ya mucha gente olvida. Ahora que los gafapastas redescubren el cine mudo con The Artist, estaría bien revisitar los grandes clásicos, como esta película.


La escena es una de esas azotainas que antes nadie tenía reparos en representar. Tim (Charles Farrell), un empleado de la compañía eléctrica, descubre a  Mary (Janet Gaynor) robando. Ella es white trash, basura blanca que malvive en el campo. Pero el encuentro con Tim le cambiará la vida.


Como verán, él no se anda con bromas. Lo más delicioso, cómo ella se frota, durante un buen rato, el culo dolorido.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Relación D/s en La piel que habito

La piel que habito (2011) es una de las escasas películas en las que Pedro Almodóvar adapta un guión no propio. En este caso, lo hace a partir de la novela Tarántula, de Thierry Jonquet, de la que mantiene las líneas primordiales. Película controvertida, puedes detestarla o puedes adorarla. Yo me quedo en medio, reconozco grandes logros -sobre todo la capacidad de Almodóvar de experimentar y mezclar géneros-  pero también me rechinan muchas cosas - por ejemplo, parte del casting, empezando por Antonio Banderas, que podría haber dado más.


En la escena, el doctor Ledgard (Banderas) no sabe cómo reaccionar ante la declaración de Vera (Elena Anaya). ¿Se está entregando, la chica? ¿Por fin? El doctor -que me esperaba más frío, más siniestro, más malote!!!- ha creado una criatura nueva y perfecta y ahora se encuentra con el resultado: ni su venganza es tan redonda ni sus reacciones tan ... ¿inhumanas?


Lean la novela, amantes del BDSM. Les aseguro que es mucho más D/s, pero muchisimo más que la peli. Comprobarán que Almodovar se la ha cogido con papel de fumar y ha eliminado cosas muy escabrosas, oscuras y molonas.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Los riesgos de modelar a la mujer perfecta en Laura

Laura (Otto Preminger, 1944) no es sólo una de las grandes películas del cine negro, también es una poderosa historia de amor oscuro y turbador. O, esencialmente de dos amores. Por un lado el de Waldo (Clifton Webb), el caballero culto que idolatra a su "creación". Por otro, el de McPherson (Dana Andrews), el detective encargado del caso de asesinato de Laura.


La película es un compendio de fetichisimo y deseos de dominar. El detective McPherson, enamorado de una mujer muerta a la que conoce por un retrato, enamorado de una imagen ideal y misteriosa. Un necrófilo de manual. Y Waldo, empeñado en hacer de Laura una mujer fascinante, única, perfecta. En la escena, el caballero recuerda, en varios flashbacks, cómo quiso hacer de Laura (Gene Tierney) la mujer que no era.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Violación ¿consentida? en Perros de paja

Perros de paja (1971) es una de las películas que hicieron grande a Sam Peckinpah, un intenso análisis sobre la violencia humana que deja a Tarantino y otros directores similares como unas nenazas. Un tipo pacífico (Dustin Hoffman) que, forzado por las circunstancias, se transforma en un hombre de extrema violencia, un planteamiento que, en su día, ocasionó una fuerte polémica.


Como polémica es la escena de la violación de Susan George, en la que ella reacciona de manera muy ambigua. ¿Está disfrutando con el patán que le pega y la agrede? En ciertos momentos parece que sí, y mucho.


Gracias a Marlowe por sugerir esta escena (ya vi la peli).


domingo, 11 de diciembre de 2011

Canción con toques D/s en Cabaret

De Cabaret (Bob Fosse, 1972) no me atrevo a decir gran cosa porque una película tan mítica a mi me deja sin palabras. Bob Fosse en estado puro, puedes ver una y otra vez los números musicales que jamás te llegarán a cansar (si eres un fan empedernido del cine musical, como yo).

Repasándola un poco pensé que los toques fetish son muy abundantes en la película, principalmente en todo lo que acontece en el Kit Kat Club y empezando por el maestro de ceremonias (Joel Grey). Luego me he parado en el tema Mein Herr y upsss. En la canción que interpreta Liza Minelli, una chica se despide de su amante con frases como ésta:

You have to understand the way I am, mein Herr
A tiger is a tiger, not a lamb, mein Herr
You'll never turn the vinegar to jam, mein Herr
So I do what I do
When I'm through, then I'm through.
And I'm through.

Que viene a decir: Debes entender cómo soy, mi Señor, que un tigre es un tigre y no un cordero, mi Señor. Que nunca convertirás el vinagre en mermelada, mi Señor. Y por tanto haré lo que tengo que hacer. Cuando me despido, me despido. Y me despido. 

Así, con un par. Yo no se ustedes, pero yo el punto D/s se lo veo a leguas. 






lunes, 5 de diciembre de 2011

Azotes (con un plus de humillación) en El gran McLintock

El gran McLintock (Andrew V. McLaglen, 1963) es un western que quiso aprovechar la química que derrocharon  John Wayne y Maureen O´Hara en El hombre tranquilo. Es un western menor que yo no recuerdo haber visto y que gracias a gata{ADC} traemos aquí. 

La escena que se inserta es fabulosa: Mr McLintock (John Wayne) persigue a su mujer, que por lo visto es una desobediente y una rebelde. La persigue por todo el pueblo entre las risas del vecindario.  La pobre Mrs McLintock (Maureen O´Hara) se cae, se rompe las enaguas, se moja, la lía parda pero no desfallece, hasta que el marido la pilla y le da una buena tunda con una paleta de chimenea. 


Como pueden imaginar, una escena así hace rasgarse las vestiduras a mucha gente hoy día. Ni pensar una peli actual en la que ocurran esas cosas y encima con tono de comedia. Cuánto daño, la corrección política. 


viernes, 2 de diciembre de 2011

Dominación y fetichismo en Perdición

Perdición (Double Indemnity, 1944) es una de las películas que hacen de Billy Wilder un Dios -como decía Trueba-. Genial cinta de cine negro, con un ritmo narrativo lleno de tensión, narra la historia sórdida de un vendedor de seguros y una femme fatale que conspiran en un asesinato.


La escena que comentamos pertenece casi al principio y en ella se presentan los cauces por donde va a discurrir el drama. Walter (Fred MacMurray) va a casa de Phyllis (Barbara Stanwyck) para hacer una gestiones en su seguro. Ella aparece en la planta superior, él la conoce al pie de la escalera. De esta manera ya vamos percibiendo detalles: ella es la que manda, manipula y dirige. Pero observen el momento en el que baja: ella luce una pulsera en el tobillo. Luego, Walter va a repetir un par de veces la excitación que le ha producido esa pulsera. Un fetiche sexual y un símbolo de la unión que les va a condenar para siempre.


miércoles, 30 de noviembre de 2011

Azotes en Lawrence de Arabia

Lawrence de Arabia (David Lean, 1962) es el gran clásico bigger than life modelo de película de aventuras, de banda sonora que provoca pellizcos de emoción, la peli que nos hizo enamorarnos del desierto y de los beduinos, esa gente libre como el viento... Un olvido imperdonable en este espacio y que gracias a gata{ADC} traemos aquí.


Olvido imperdonable porque cuenta con una suculenta escena de azotes con vara, esa en la que Lawrence (Peter O´Toole) es capturado por los turcos. Y qué malos nos pone David Lean a los turcos. Malos y lujuriosos, que babean ante el panorama: un inglés blanquito como la nieve, con cara de ángel. Lawrence aguanta el tipo -quizás hasta le mola el invento- y el bey turco (José Ferrer) se esconde tras una puerta, para que no le vean la excitación.   Y para gloria del cine español, el estupendo Fernando Sancho haciendo de sargento turco, también sádico y lujurioso.

lunes, 28 de noviembre de 2011

Lucha casi sexual en Mujeres enamoradas

Mujeres enamoradas (1969) es una película del lisérgico Ken Russell, que traemos para rendirle homenaje. Su cine, extraño y minoritario, siempre tuvo una profunda carga sexual, en ocasiones con componentes D/s.


Véase la poderosa escena de lucha entre Oliver Reed y Alan Bates, ambos gloriosamente desnudos. La lucha como símbolo de egos enfrentados para ver quién tiene el poder. Una escena que es casi un acto sexual entre los dos hombres.


También de Ken Russell, en este blog:  La pasión de China Blue.



viernes, 25 de noviembre de 2011

Dómina en I´m no angel

No soy ningún ángel (I´m no angel, Wesley Ruggles, 1933) es uno de los hitos de la gran Mae West, esa hembra contundente, que hoy nos parece tan anticuada -ese contoneo al caminar!!!-. Rotunda, llena de curvas, dueña de una sensualidad exhuberante, segura de su sexualidad y del poder que ejercía sobre los hombres de la época, Mae West ejercía de Dómina seductora en sus comedias y en su vida.


En No soy ningún ángel se lleva al huerto a un jovencito Cary Grant en una de sus primeras películas. Es en esta cinta donde pronuncia una de sus frases míticas: Cuando soy buena, soy muy buena, pero cuando soy mala, soy mejor (When I´m good, I´m very good, but when I´m bad, I´m better). No se la pierdan en VOSE: frase más propia de Dómina no la hay. 

(Spirit, gracias por tu post, por fin me acordé de Mae West!!!)

martes, 22 de noviembre de 2011

Una parafilia incestuosa en Soñadores

Soñadores (Bernardo Bertolucci, 2003) es, por ahora, la última película de este director, una mezcla preciosista de erotismo y revolución. En el marco del Mayo del 68, un joven estudiante estadounidense entabla una relación de amor y dependencia con dos hermanos, Isabelle (Eva Green) y Theo (Louis Garrel).


En la escena que viene a continuación, Matthew (Michael Pitt) reclama a los hermanos el mismo amor que él está dispuesto a dar. Y parece que no se conforma con el de uno. Aunque en realidad que Michael sea objeto de una determinada parafilia -atracción por el incesto-, es sólo un pretexto para incluir esta magnífica película en Cine y BDSM. No se qué opinarán ustedes. 


(Gracias a Marlowe por darme ideas para nuevas entradas al blog)


miércoles, 16 de noviembre de 2011

Fetichismo en Simón del desierto

Simón del desierto (1965) es una película de la etapa mexicana de Luis Buñuel, imprescindible para todo cinéfilo que se precie -porque Buñuel es un imprescindible-. Una sátira llena de sexo, mala leche y surrealismo sobre la historia de Simón el Estilita, aquel ermitaño que se fue a pasar años a lo alto de una columna en medio del desierto, para alejarse del mundo y sus tentaciones.


En la escena, Simón (Claudio Brook) es tentado por el Diablo (Silvia Pinal) en forma de dulce niñita. O mujer disfrazada de niña, que provoca al pobre santurrón enseñándole todo lo enseñable. La socarronería, el impudor y la llamada al escándalo, firma de Buñuel, brillan aquí en todo su esplendor. Pero nada puede con Simón. Simón es mucho (tonto) Simón.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Esclavo en La corte del Faraón

La Corte del Faraón (Jose Luis García Sáchez, 1985) es una deliciosa comedia sobre cómicos y las formas de sortear la censura en la España de los años 40. Es una de esas películas donde están actores y actrices memorables de nuestro cine, con una trama delirante y con ese histrionimo de los grandes que nunca sobra.


La historia cuenta el por qué del arresto de un grupo de cómicos aficionados, al atreverse a representar la zarzuela La Corte del Faraón, una obra que estaba prohibida. En una de las escenas más conocidas, la bella Lota (Ana Belén) intenta seducir al esclavo José (Antonio Banderas). El pobre chavalín es sometido a un acoso pertinaz por la dama, que se muere por sus huesos... pero caray, para eso están los esclavos guapos, ¿no?


sábado, 5 de noviembre de 2011

Lap dance en Death Proof

Death Proof (2007) es la peli dirigida por Quentin Tarantino que forma parte de Grindhouse (la otra peli, de Robert Roríguez, es Planet Terror)..Homenaje a la serie Z más cutre y sangrienta, Death Proof no fue un éxito de crítica, pero es que la peli es una gran broma de chicas calientes y persecuciones alucinantes. Y así hay que tomársela.


Como caliente es el lap dance que se marca Arlene (Vanessa Ferlito) con el malo, el gran Kurt Russell, paradigma de las pelis chorras de los 70. Con el tema Down in Mexico de The Coasters, el baile es un subidón de sexo sudoroso. Sumisas, tomad nota. Y también que para estar sexy no hace falta lencería fina.


miércoles, 2 de noviembre de 2011

Elementos BDSM en Airbag

Airbag (Juanma Bajo Ulloa, 1996) es una celebrada comedia gamberra a la que no hay que dar muchas vueltas y se debe disfrutar tal y como viene. Chistes buenos que se alternan con chistes muy malos y un reparto abultadísimo donde brilla gente que hoy en día sale poco en las películas (Manuel Manquiña, ¿dónde estas????).


En el club de alterne donde empieza todo el lío aparecen un par de salas con profesionales del BDSM. Una de chicos y otra de chicas con toda la parafernalia fetichista al uso. Ni una concesión a la originalidad, lo cual era de esperar en una peli llena de tópicos a la que, repito, no hay que pedir más de lo que da. 


lunes, 17 de octubre de 2011

Humillación en Freaks

Freaks (Tod Browning, 1932) es una terrible, perturbadora y en ocasiones poética película sobre la que se ha escrito mucho. La historia de amor y de codicia que transcurrre en el circo de monstruos es narrada con una extraordinaria naturalidad, sin concesiones al sentimentalismo, y sin escatimar en crueldad. 


En la escena que sugiero asistimos a la cumbre de humillación que sufre el enano Hans (Harry Earles) a lo largo de la película. Perdidamente enamorado de la trapecista Cleopatra (Olga Baclanova), ha tragado con sus burlas y desplantes, e incluso ahora, el día de su boda, hasta es capaz de vivir como cornudo.


Escena de la boda en Freaks.

jueves, 13 de octubre de 2011

Otra pareja D/s más, en Bola de fuego

Dentro del subgénero de la srewball comedy, ésta es mi favorita, una muy peculiar versión de Blancanieves y los siete enanitos, con Barbara Stanwyck y Gary Cooper. Dirigida por Howard Hawks (1941), narra cómo una entrañable comunidad de intelectuales, liderada por Mr Potts (Gary Cooper), entra en caos con la llegada de Sugarpuss (Barbara Stanwyck). 


La bola de fuego del título es la propia Stanwyck, arrolladora y desenvuelta, que conduce a la pandilla de genios hacia una vida más intensa y divertida. Y especialmente al principe azul que es Gary Cooper, con poco mundo y ganas de dejarse llevar. Ganas de aprender a besar: yum, yum, yumyum.


lunes, 10 de octubre de 2011

Pareja D/s en La fiera de mi niña

La fiera de mi niña (Howard Hawks, 1938) es una de las películas clásicas del screwball, subgénero de comedia que viene marcado por diálogos apabullantes e ingeniosos y el carácter loco e impredecible de los protagonistas. Yo confieso que es un género que en ocasiones me agota, es más, reconozco que las veces que he visto La fiera de mi niña he llegado a cabrearme con Katharine Hepburn, aquí Susan Vance, de lo malcriada y caprichosa que resulta.


Mi lectura D/s de la película es bien simple: Cary Grant (aquí, el tímido paleontólogo David Huxley) es el caballero sumiso ideal para la Dominante Susan. Arquetipo de la mujer manipuladora -pero simpática-, Susan es capaz de todo por romper el noviazgo de David con una sosa secretaria. Y el propio David aparece como un hombre con poca voluntad propia y, aunque lo niegue, deseoso de complacer todos los caprichos de la dama. La pantera que da título original a la cinta (Bringing up Baby) viene a ser la metáfora ideal de la mujer Dominante.
 

sábado, 8 de octubre de 2011

Sadismo y BDSM (reflexiones, que no película)

En este blog no solemos dar entrada a pelis donde BDSM y sexo en general tengan componentes de sadismo gratuito, probablemente se nos haya colado alguna peli así -ahora pienso en Acción mutante, por ejemplo- pero la idea es siempre excluir cine donde el sadismo no sea utilizado de manera consensuada. He visto en algún blog y en algún foro, cómo cuando se pretende hacer un listado de películas BDSM se incluyen cintas como Saló de Pasolini.


Pues mal. Muy mal.


No digo yo que el personal que lee estas cosas sea tonto -aunque alguno habrá- pero me mosquea ver esas listas y comprobar lo poco lúcidos que son algunos blogueros/foreros respecto al tema. Pelis de asesinos en serie. Pelis sobre snuff - por ejemplo Asesinato en 8 mm -. Pelis porno-gore como Hostel. Pues no, no las metamos en el saco del cine BDSM porque no tienen que ver.


Pero no voy a dar la charla sobre el consenso y tal, que no es el lugar. Ya digo que alguna cinta con violencia gratuita se me habrá colado aquí, pero siempre he intentado justificarlas, dado que en este espacio se comentan preferentemente escenas, secuencias, momentos con toques BDSM o D/s. Encontrar películas exclusivamente BDSM, que no sean porno y sean mínimamente comerciales, es casi imposible. Pero toques BDSM hay y muchos. Seamos serios y no incluyamos películas que de BDSM no tienen ni un retazo, para no confundir.



sábado, 10 de septiembre de 2011

Sadomasoquismo en Un método peligroso

Un método peligroso es la nueva película de David Cronenberg, recien presentada en el Festival de Venecia y con estreno previsto el 25 de noviembre. Basada en un texto teatral, tiene a Sigmund Freud (Viggo Mortensen, mmm) y a Carl Jung (Michael Fassbender, mmm, mmm) como personajes principales de la trama, junto a Keira Knightley. 


Yo siempre tengo reparos ante las películas de época, y más con Keira Knightley, que es casi sinónimo de enésima versión de novela de Jane Austen. ¿Y Cronenberg como director??? Muy raro. 


Y sin embargo el trailer promete. Promete sexo, perversiones y represiones, deseos y terapias, corsés, moños desechos, maneras corteses e instinto ... Ojalá no sea una ilusión.

martes, 30 de agosto de 2011

Pies en Jackie Brown

Jackie Brown (1997) es una de mis pelis preferidas de Tarantino, mucho más contenida que otras suyas y por ello, con más cargas de profundidad. Junto al humor negro y la violencia firma de la casa, la vejez, la soledad y  las segundas oportunidades son temas que completan una peli de muchos tiros, mucha acción y muchos diálogos brillantes (y Samuel L. Jackson, mmm)


La escena de fetichismo de pies en Jackie Brown está protagonizada por Bridget Fonda (una de mis morbosas favoritas), que con un par de suculentos anillos y un sorbido de espaguetis, compone una secuencia llena de erotismo. La cara de Robert de Niro, sentado al lado, lo dice todo.

lunes, 29 de agosto de 2011

Fetichismo de pies en Pulp Fiction

La pasión de Tarantino por los pies femeninos, que muestra en sus películas, tiene un magistral ejemplo en la conversación entre Vincent (John Travolta)  y Jules (Samuel L. Jackson). Discuten sobre si dar un masaje en los pies a una mujer tiene o no un significado erótico, discusión que Vincent concluye así:


Yo no digo que él tuviera razón, pero tú dices que un masaje en el pie no significa nada, y yo digo que sí. Le he dado millones de masajes en el pie a un millón de mujeres y todos significaron algo. Actuamos como si no, pero tienen un significado. Eso es lo cojonudo del asunto. Estas cosas sensuales continúan y nadie habla de ellas, pero uno lo sabe, ella lo sabe, el puto Marsellus lo sabía y Antwan debería haberlo sabido...



Tienen más sobre Tarantino y su amor por el pie femenino AQUI


Y sobre el BDSM en Pulp Fiction, AQUI

lunes, 8 de agosto de 2011

Sumiso en La carne

La carne (1991) es una de las últimas películas de Marco Ferreri y plantea algunas de sus obsesiones y fantasías. El humor visto desde la sátira, el sexo tremendo y tremebundo y ... la comida. Comida convertida en objeto de deseo, fetichismo culinario, la carne amada convertida en alimento sublime.

La relación que se entabla entre Paolo (Sergio Castellito), un caballero soso y apocado  y su amante, la exhuberante Francesca (Francesca Dellera) sigue pautas D/s y deriva en el clímax más absoluto de posesión entre uno y otra. Y no desvelo más.



sábado, 6 de agosto de 2011

Sexo y dominación en Una historia de violencia

Una historia de violencia (2005) fue una aclamada cinta dirigida por David Cronenberg, que se alejaba en argumento y atmósfera de sus películas anteriores. Éste es cine negro del bueno, violento, pero de violencia contenida y sabiamente dosificada y que cuenta con ese bestia de la actuación que es Viggo Mortensen como protagonista ( y soy terriblemente parcial, porque Mr Mortensen es uno de mis actores fetiches).


La escena del polvo en la escalera es crucial para el desarrollo de la peli: el hasta ahora dulce Tom deviene en Macho dominante y encelado. Una buena bronca con la esposa (Maria Bello) es el acicate perfecto para un encuentro sexual de los que no se olvidan, ni escaleras ni pollas, nada es obstáculo cuando la sangre está caliente. Un polvo-metáfora de la vida que Tom ha vuelto a recobrar y que implica un camino sin retorno.


Mi agradecimiento a gata{ADC} por sugerirme -y recordarme- esta magnífica escena.

miércoles, 27 de julio de 2011

Subasta de esclavas en Carne de neón

Carne de neón (2010) es una película dirigida por Paco Cabezas que viene a ser una versión cañí de Snatch, cerdos y diamantes  (Guy Ritchie, 2000). La peli habla de gente muy chunga y muy tirada, pero en clave de comedia, lo cual -y aprovechando el tirón de Mario Casas- tiene más gancho para la taquilla. Porque es una peli con escasas ínfulas, hacer taquilla y poco más, con guión previsible, muy previsible, y lleno de clichés. Y es que cuando se quiere ser políticamente incorrecto pero forzando el guión, salen cosas con muy poca gracia.


Yo, que cada vez tengo menos aguante, lo pasé francamente mal con la escena que traigo a continuación. Ni comedia ni leches, hay escenas que son muy inaguantables y que no puedo entender que sean objeto de frivolidad: Ricky (Mario Casas) y Angelito (Vicente Romero, que siempre hace el mismo papel) acuden a una subasta de esclavas, para surtir al puticlub que han creado. Los tipos babean que da asco, las chicas lloran ... sabemos que eso es real. A mi, al menos, se me quitan las ganas de fantasear con cosas así.


(Lo mejor de la peli, Ángela Molina, cada vez que aparece, brilla.)

miércoles, 20 de julio de 2011

Doma (sin sexo) en Black Snake Moan

Black Snake Moan (Craig Brewer, 2006) es una muy curiosa película donde hay elementos del mundo BDSM sin que el argumento tenga ni pizca que ver con el BDSM. Ese es el tipo de pelis, por cierto, que molan en este blog -esas mentes calenturientas de algunos guionistas, que meten sus fantasías viciosas donde más les peta-.


La historia va de una chica descocada -muy descocada si advertimos que la historia transcurre en ese Medio Oeste hipermoralista que parece existe de verdad- y un viejo que se empeña en redimirla. Que la redención pase por estar encadenada las 24 horas y así no tener ocasión de pecar, es la gracia del asunto.


Chirtina Ricci sale ultraflaca y putísima. Lástima que no haya feeling con el bueno de Samuel L. Jackson, aqui envejecido para el papel, pero apetitoso como siempre -yo amo a Samuel L. Jackson, me pone mil cuando se pone bíblico, tipo Jungla de cristal III o Pulp Fiction-.


(Mil gracias a monah por sugerirme esta película.)

sábado, 25 de junio de 2011

Dominante en Lo que el viento se llevó


Parece mentira que haya olvidado esta escena, un momentazo de cine importantísimo en mi vida. Aunque la leí primero, cuando tuve entre manos la novela de Margaret Mitchell, una escena tremenda, llena de erotismo que en la película resulta colosal. 

Dos bichos dominantes, Reth y Scarlett, enfrentados una vez más y ahora, de forma casi, casi definitiva. Los celos de Reth que ya no van a dar más oportunidades a las maquinaciones de Scarlett. Rhett borracho y lúcido, negándose a aceptar que Scarlett siga enamorada del lacio de Ashley. Rhett echándose en brazos a Scarlett y ella que ni opone resistencia porque ya va sabiendo lo que quiere.  Esa escalera que lleva al paraíso...

Al pie de la escalera, en Lo que el viento se llevó.

martes, 24 de mayo de 2011

Estética D/s en Scott Pilgrim contra el mundo

Scott Pilgrim contra el mundo (Edgar Wrigth, 2010) es una de esas pelis moloncillas basadas en un cómic, con muchas onomatopeyas y bomm, crash, pum!!! No está mal y tiene su punto, aunque el tramo final se me hizo un poco pesadito. La peli cuenta cómo el amigo Scott (Michael Cera) debe vencer a los siete malvados ex-novios de la chica de sus sueños, Ramona (Mary Elizabeth Winstead).


En la escena que he seleccionado, Scott se enfrenta al más malvado de los ex de Ramona, el perverso Gideon (Jason Schwartzman). Como pueden imaginar, la película no tiene nada de que ver con la D/s pero la disposición del malo y la chica en la escena si que adopta tintes de Dominación/sumisión. Y con collar incluido (aunque en realidad la chica lleva un microchip y su sumisión es más falsa que las monedas del Rey Miguel).

Escena de estética D/s de Scott Pilgrim vs. the world

sábado, 21 de mayo de 2011

Una relación sadomasoquista en Año bisiesto

Dentro del páramo de cine de estreno con temática BDSM, encuentro Año bisiesto,  película mexicana casi acabada de estrenar. No la he visto pero me huele a chamusquina. Lees la sinopsis, le echas un vistazo al trailer y ya está casi todo dicho: chica solitaria con ganas de encontrar EL AMOR. Amante de una noche que deviene en caballero sádico. Ella que se aferra a lo que sea por tal de tener pareja. Él que tiene pinta de tío serio y raro. Lo típico. Relación BDSM churretosa que no lleva a ninguna parte y presenta a la peña del sado como gente chunga, desgraciaita y triste. En fin, la cotidiana falta de originalidad. 

La publicidad de la peli, por cierto, advierte de escenas fuertes (su lluvia dorada y cosillas así), para dar susto al personal. 

lunes, 14 de marzo de 2011

Esclavas en Spartacus: Sangre y arena

La serie de televisión Spartacus: Sangre y arena (que emite Canal + y Cuatro) contiene un enorme abanico de ideas para juegos eróticos BDSM. Pasemos por alto la veracidad de los hechos que narra y pasemos sobre todo por alto, la consciente exageración de sangre y sexo de la serie - la sobreabundancia de sangre y sexo puede tener un efecto contraproducente en el espectador. Y en Spartacus ni escatiman en violencia ni en sexo bizarro, lo cual, para mi gusto, aburre y mucho.


Pasando eso por alto, es divertido pararse en las aventuras lúdico-eróticas de Batiatus (John Hannah), ese lúbrico director de la escuela de gladiadores, junto a Lucrecia (Lucy Lawless), su inefable esposa. En la escena que enlazo la pareja se muestra como siempre, sexualmente indolente, y son las esclavas las que instrumentalizan el placer.

Escena de baño con esclavas.

viernes, 4 de febrero de 2011

Exhibicionismo (en todos los sentidos) de El último tango en París



Hoy toca hablar de El último tango en París porque ha fallecido María Schneider, la actriz devorada por el símbolo, tan joven -sólo 19 años cuando rodó la película- y capaz de plantar cara al mito entre los mitos, Marlon Brando. Hay quien afirma que es una película que no ha resistido el paso del tiempo. Quizás haya momentos lentos y algo casinos, pero escenas como la que ofrecemos a continuación son magistrales, geniales. Jamás envejecerán.


El tango final es el final de la pareja, un tango deconstruido y absurdo. Simboliza a los amantes cansados, que han agotado ya todo el caudal de sexo que parecía imparable al principio. Ahora se exhiben sin pudor, el muestra su culo, ambos su patetismo, se abrazan con pocas ganas y se ríen de su público. El es un fracasado. Ella, una burguesita que juega a provocar. ¿Que no ha resistido el paso del tiempo? Ja. 

(Otras entradas de Cine y BDSM sobre El último tango en París: Aquíaquí  y  aquí )


Escena del tango

jueves, 3 de febrero de 2011

Juegos BDSM en Cachorro

Cachorro (2004) es una de esas películas de Miguel Albadalejo aparentemente sencilla y naturalista pero con trasfondo complejo. Bajo la trama anecdótica de un chaval que debe pasar una larga temporada al cuidado de su tío homosexual, late una hermosa historia. El sentirse abandonado por mamá a esa edad tan complicada entre la niñez y la adolescencia. El transito desde una vida irresponsable y frívola hacia la paternidad fortuita y la zambullida en la madurez. Y además, un retrato sin tópicos de hombres homosexuales que bordea el costumbrismo pero no cae en él.


La escena BDSM es muy breve: Bernardo (David Castillo) se despierta en la noche y oye ruidos que vienen del cuarto de tito Pedro (Jose Luis García-Pérez). Un pelín asustado, empuja la puerta y se lo encuentra tan ricamente esposado y acompañado de un muchachote embutido en cuero. La escena, como ya digo, es breve y no tiene moralina, se presenta tal cual, dos chicos que no son Amo y sumiso, sino dos que se gustan y tienen ganas de jugar. Pocas veces el sexo BDSM aparece en el cine con tanta naturalidad.



lunes, 31 de enero de 2011

Mazmorra en Mujer blanca soltera busca

Mujer blanca soltera busca (Barbet Schroeder, 1992) es un estimable thriller que dió un empujón al género en la década de los 90 y contribuyó a que pasaramos buenos ratos en las salas de cine. La historia tenía un punto de partida original (que en films posteriores sería incesantemente versionado): una chica encuentra a la compañera de piso ideal, compañera que, como mandan los cánones del thriller, sale rana y deviene en desgraciada psicótica arruina vidas.


La escena, ya casi al final, presenta a la pobre víctima (Bridget Fonda) a punto de descubrir lo mala que es su compi de piso (la morbosisima Jennifer Jason-Leigh). Para ello la ha seguido al típico local BDSM de las películas: oscuro, siniestro, donde te meten mano a la que te descuidas... me encanta. Pelis así contribuian a mi miedo hacia las mazmorras. Yo vi esa peli en su dia y pensé, mami, zuzto.


Y es que las chicas malas, como nuestra morbosa favorita Jason-Leigh, suelen acudir a antros de perdición como esos. Lo mejor, para mi, esos espectadores  elegantes que asisten a un espectáculo que no podemos ver pero si intuir, glupss, qué pasará en escena?????


(Gracias mil a osheaa, el amable lector/a que me ha sugerido esta escena )

martes, 25 de enero de 2011

Y ahora sumiso, en Malas influencias

Malas influencias (1990) es una pelicula del usualmente interesante Curtis Hanson, un director que, sin ser un genio, cuando se pone retorcido lo hace bastante bien (La mano que mece la cuna).


El punto fuerte de la película son los dos protagonistas. Por un lado, James Spader -sobran las palabras-  y por el otro,  Rob Lowe. Para las que coleccionábamos el SuperPop,  Rob Lowe era un chico cañón en los 80 que cayó en desgracia por hacerse unas fotos que no debía. Curtis Hanson lo sacó del ostracismo y le dio un jugoso papel de ángel perverso. 


En Malas infuencias, James Spader es Michael, un joven ejecutivo de vida aburrida y calculada al milímetro al que una noche salvan en una bronca de bar. Su salvador, Alex (Rob Lowe) le introducirá en una nueva visión de los placeres: lo típico, mucho sexo, drogas y toda la pesca... y la casi segura convicción de que cualquier cosa es posible.


Nuestro James Spader, tan tiernecito aquí, muta en chico sumiso y complaciente ante el carismático Alex, un tipo que sabe mover los hilos y llevarse el gato al agua, como en esta escena del principio.

lunes, 24 de enero de 2011

Nuestro Dominante favorito: James Spader en Secretary

Yo me resistía a reseñar Secretary en este espacio porque es la peli hiperconocida de todo aquel que vive -de la manera que sea- el mundo BDSM. Le preguntas a cualquiera: cíteme, por favor, dos pelis de temática BDSM que conozca y te responden invariablemente, Historia de O y Secretary. (Y sepan que Historia de O no saldrá reseñada aquí jamás.)


Pero visto que además de servidora, el bueno de James Spader tiene más fans (o sadofans) y como la inspiración en este blog la tenía de capa caída, he pensado dedicar unos minutitos al gozo de contemplar a nuestro morbosete preferido en la peli más románticamente bedesemera que se ha rodado hasta estos momentos. (Guionistas de cine: deberían fijarse en el enorme potencial que tienen estas historias).

Mr Grey es  la encarnación del Amo ideal de la muerte, guapo, misterioso y con un puntito indefenso que entran ganas de acunarlo. Mucho daño ha hecho de tan romántica, creo yo.

domingo, 9 de enero de 2011

Voyeurismo en sexo, mentiras y cintas de vídeo

La espléndida sexo, mentiras y cintas de vídeo (1989) fue la primera película de Steven Soderbergh, un gran éxito de taquilla y también de crítica; consiguió la Palma de Oro de Cannes y marcó un hito en el llamado cine independiente: esas películas hechas en dos días y con cuatro duros que copan el Festival de Sundance.


James Spader, nuestro morbosillo preferido, es aquí Graham, impotente y voyeur: su incapacidad sexual la suple grabando vídeos donde diferentes mujeres hablan de sexo. La horma de su zapato es Ann (Andie McDowell), frígida y aburrida de su marido (Peter Gallagher), que la engaña con su mismisima hermana (Laura San Giacomo). El sexo rodado sin glamour, el sexo hablado, las inhibiciones y la franca desinhibición ... una mezcla que en su día fue explosiva en las pantallas.