El manantial (King Vidor, 1949) es una película de pasiones bigger than life que ocupa un lugar de honor en el cine clásico. También se ha escrito mucho sobre su valor político y social, pero aquí no entramos en tales profundidades y lo único que nos interesa es el rollito sexual que se traen entre manos los protagonistas. Frívolos que somos.
Si miran la escena donde ambos se conocen ya pueden extraer conclusiones. Dominique (Patricia Neal) descubre a Howard (Gary Cooper), el arquitecto metido a peón de la construcción. Ella desde lo alto de la cantera, él utilizando un taladro -o como quiera que se llame ese aparato-de considerables proporciones. Las connotaciones fálico-sexuales están servidas.
En la segunda escena que mostramos, volvemos a disfrutar la compleja relación entre Howard y Dominique. Ese latigazo que no se queda sin "castigo" o quién es el que domina aquí.
(Un millón de gracias al lector anónimo que me recomendó la peli).
lunes, 9 de abril de 2012
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