Pink Flamingos (John Waters, 1972) es una de las películas más zafias y divertidas de la historia. La alegre pandilla de Baltimore, con Waters y Divine a la cabeza, montó un pollo monumental que aturde aún hoy a las mentes bienpensantes. Hay quien dice que es peli sólo apta para mentes enfermas.
El caso es que si eres una mente enferma como yo te ríes un montón con esta peli donde se expone un inmenso catálogo de perversiones. Hay que quitarse las gafas de pasta y disfrutar con un montaje espantoso y un guión churretosísimo pero divino. Culos que cantan, canibalismo, voyeurismo, castración, sexo sádico con pollos, fetichismo culinario, escatología, fetichismo de pies, incesto y la fecundación in vitro más cutre que se haya visto jamás. En la escena escogida, Channing, el guardian-esclavo de los Marple, se enfrenta a una de las esclavas embarazadas. Toneladas de incorrección, esta peli no es apta para los que se la cogen con papel de fumar.
sábado, 24 de marzo de 2012
Catálogo de perversiones en Pink Flamingos
Etiquetas:
esclavas,
fetichismo,
humillación,
parafilias,
sadomasoquismo,
sexo
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2 comentarios:
La ví hace tiempo, es una mezcla de sensaciones, una carrera de alta velocidad, a mi me gustó.
Me uno para seguirte en este magnifico blog.
Saludos.
Gracias, Amowhor. Ahora quizás le demos un repaso al gran John Waters, nunca suficientemente alabado en este blog.
Un saludo.
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